Hace cinco años el mundo quedó sorprendido tras conocer la historia de Dana Vulin, una joven australiana a quien quemaron dos tercios de su cuerpo, después que una mujer la acusara de tener un aventura con su esposo.
Vulin era señalada como amante y en febrero de 2012 le prendieron fuego sin reparo alguno.
Natalie Dimitrovska era la mujer acusadora. Ella junto a un cómplice, Daniel Stone, llegaron a la casa de Dana y le exigieron ver al esposo de Natalie. Lamentablemente todo se trataba de un error y cuando Dana quiso explicar que no tenía ningún amorío con el hombre casado, Natalie tomó una botella de alcohol, la roció sobre Dana y prendió fuego.
“Me roció en la cara, en los brazos, el pecho… toda, de la cintura para arriba”, recuerda Dana en su libro. “En un instante, todo era fuego. El dolor era insoportable, pero pude oír a Natalie y Daniel escapar por la puerta. Se estaban riendo de mí mientras me quemaban viva. Cuando me levanté, las llamas eran cada vez más grandes… logré llegar al fregadero y alcanzar el agua”, añade.
El caso fue llevado a una Corte, donde Natalie fue condenada a 17 años de prisión. A pesar del fallo, la piel de Dana no se restauraría tan rápido. Sufrió quemaduras de segundo y tercer grado, y durante dos años tuvo que llevar una máscara para que sus quemaduras sanaran.
Ahora, más recuperada, se muestra orgullosa en eventos y redes sociales. Aunque muchos dijeron que no podría recuperarse ni física ni psicológicamente, Dana lo logró.
Ahora luce así:
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