El hombre más sucio del mundo se baña por primera vez en 60 años y muere poco después

La muerte de Amou Haji está dando la vuelta al mundo por una razón muy especial: estaba considerado el hombre más sucio del mundo y ha fallecido pocas semanas después de darse su primer baño en 60 años

La agencia de noticias iraní IRNA ha confirmado el fallecimiento de Haji en Dezhgah, una aldea de Dehram, en la provincia suroccidental de Fars. Se cree que murió por causas naturales.


Haji llevaba décadas cubierto de hollín y suciedad desde que sufrió "contratiempos emocionales en su juventud", según sus vecinos, que hicieron que se negara a lavarse. Vivía en una humilde choza sin ningún tipo de comodidad y aislado del mundo y estaba convencido de que, si se lavaba, contraería alguna enfermedad que le llevaría irremediablemente a la muerte.

En un reportaje del Tehran Times en 2014 que recoge The Guardian, se ve a Haji fumando varios cigarrillos a la vez, fumando excrementos y comiendo restos de animales atropellados. Aseguraba que su comida favorita era el puercoespín podrido y no consumía ningún tipo de alimento fresco. A la hora de beber, lo hacía por medio de una vieja lata de aceite oxidada en la que recogía el agua sucia de los charcos cercanos.

Los médicos no hallaron ningún tipo de enfermedad más allá de la triquinosis que, además, no parecía producir síntomas. Según el doctor Molavi, la excelente salud de Haji se debía al hecho de haber desarrollado un fortísimo sistema inmunológico.

Sin embargo, la edad quiso que pocas semanas después de convencer al anciano a que se diera su primer baño en más de 60 años, este falleciera.