Las protestas para clamar justicia por la joven venezolana en Argentina, violada en una entrevista de trabajo, continúan en los tribunales de la capital Buenos Aires.
En esta oportunidad, un grupo de ciudadanos venezolanos y argentinos realizan una vigilia al frente de la sede judicial, desde donde se dictó libertad provisional a Ireneo Humberto Garzón, acusado con “pruebas objetivas” de haber drogado y luego abusado sexualmente de la joven, cuyo nombre no es revelado por seguridad.
Este lunes, en horas del mediodía, el acusado testificó por videollamada e igual no se dictó orden de aprehensión, lo que ha consternado a gran parte de la sociedad argentina, ya no solo la diáspora venezolana, que le pide justicia al sistema judicial de la nación sudamericana.
Por otra parte, la defensa de Garzón ha argumentado que la relación sexual fue consentida por la joven de 18 años. “En ningún momento la drogó, en ningún momento la violó”, dijo a medios.
Denuncia contra la juez
Fue emitida una denuncia, ante el Consejo de la Magistratura de Argentina, contra la juez del caso por "mal desempeño" en cuanto a sus funciones, además de presuntamente despreciar "circunstancias objetivas que tornaban inviable la libertad del imputado".
El consejero Diego Marías acusó a la maestra de la ley de "soslayar" un dato objetivo que "verifica el riesgo de fuga" por parte del acusado.
Con todas estas pruebas, quienes integran la acusación, sostienen que Karina Zucconi debe ser suspendida y que se inicie un proceso para que sea removida de las cortes.
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