El diplomático viajó a Ecuador luego de que el Gobierno, organizaciones indígenas y distintos sectores de la sociedad solicitaron asistencia de la ONU para buscar entendimientos y superar sus diferencias.
A principios de octubre se produjeron una serie de protestas sociales tras la proclamación de un decreto que suprimió las subvenciones al combustible que provocaba el alza de precios de estos, y la posterior instauración del estado de excepción, causando 8 muertos, 1340 heridos y 1192 heridos, entre ellos menores de edad, mujeres embarazadas, personas de edad avanzada, personas con discapacidad y periodistas.
Felicitación y exhortación
En las reuniones que mantuvo en Quito, el 29 y 30 de octubre, el enviado de la ONU felicitó a las partes por haber detenido la escalada de tensión social de principios de octubre mediante una actitud constructiva y con la voluntad de entablar un diálogo.
Asimismo, instó a las partes a seguir acercando sus posiciones y a evitar posturas que pudieran dificultar las conversaciones.
“El objetivo común de todos los actores nacionales debe ser alcanzar soluciones consensuadas que beneficien a todo el país y faciliten la gobernabilidad, el diálogo inclusivo y la prosperidad”, dijo el embajador Valdés.
El asesor de António Guterres también reiteró la disposición de la ONU de acompañar un proceso de diálogo inclusivo y dirigido por actores nacionales que contribuya al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Fuente: Globovisión /ONU/GM
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