Varias universidades de Ecuador han empezado a preparar protocolos y normas para el regreso de los estudiantes a las aulas, aunque la modalidad de educación virtual, a través de internet, aún se mantendrá mientas persista el alto riesgo de contagio de coronavirus.
Centros académicos como la Universidad de las Américas (UDLA, privada) y la Católica de la ciudad andina de Cuenca, según anunciaron, ya han empezado a preparar protocolos para las carreras que requieren de la presencia de los estudiantes.
De su lado, la gubernamental Secretaría de Educación Superior no se ha pronunciado de forma oficial al respecto, aunque ha expresado que el regreso a clases de forma presencial “está en manos directamente de cada universidad” y del Comité de Operaciones de Emergencia (COE), encargado de todo lo relacionado con la pandemia.
La UDLA, ubicada en el norte de Quito, prevé iniciar el periodo académico el próximo lunes con clases totalmente virtuales, aunque tiene en sus planes instaurar un modelo de clases mixtas, que mezcle por igual al sistema presencial y el virtual.
Además, cámaras de alta definición con micrófono han sido instaladas en todas las aulas y laboratorios de esa universidad para que los profesores puedan dictar clases en el aula y los estudiantes las reciban a través de internet.
Asimismo, prevé distribuir las clases prácticas de laboratorio para que los estudiantes puedan realizar sus prácticas en los tiempos adecuados.
“Distribuiremos las prácticas de laboratorio para que una práctica que antes demoraba una hora ahora demore tres, considerando que en una hora solo asistirá el 30 % de los estudiantes”, refirió a Efe René Cordero, director de Operaciones de la UDLA.
La Universidad Católica de Cuenca tiene elaborado un plan de retorno a las aulas, aunque espera la aprobación del COE para que se pueda aplicar con el inicio del nuevo semestre académico, el próximo 19 de octubre.
Con un aforo del 30 %, que supone una media de quince personas por aula, se ha creado un plan para carreras como Ingeniería Civil, Arquitectura, Medicina y Psicología, en las que se dividirá a los diferentes cursos en grupos.
Ello permitirá que los estudiantes, en cada grupo, hagan uso de las instalaciones (aulas, laboratorios) durante 15 días seguidos con el fin de “tener un mejor control y evidenciar si se presenta algún contagio”, destacó el rector de la Católica de Cuenca, Enrique Pozo Cabrera.
Además, indicó que el protocolo tendrá todas las medidas de bioseguriad básica como el registro de temperatura corporal del alumno, el frecuente lavado de manos, separadores de cristal o material sintético en las aulas de clase y la toma de pruebas de COVID-19, entre otras medidas.
Alejandro Farfán, decano de la Facultad de Odontología de la Universidad Central del Ecuador (UCE, estatal) comentó que las clases generales que inician el 30 de noviembre serán virtuales y que se mantendrán así hasta que exista menos riesgo de contagio.
Farfán estimó que el retorno podrían tener lugar a finales de febrero próximo, periodo que coincide con el cálculo de los eventuales procesos de vacunación que se calculan para el país.
El académico dijo, con respecto a las prácticas, que los estudiantes deberán cumplir con una jornada extraordinaria en marzo próximo, que incluiría los fines de semana, y que es visto como un periodo “amplio” para que los alumnos puedan realizar sus trabajos de forma óptima y segura.
El pasado 13 de marzo, la emergencia sanitaria por la expansión de la COVID-19, obligó a suspender las actividades académicas en todo el país, aunque los centros académicos han puesto en marcha planes emergentes para continuar los procesos de enseñanza de forma virtual. EFE
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