Sophia Pedraza es una profesora de 26 años que ha dejado su puesto de trabajo en Londres para dedicarse de manera profesional y a tiempo completo a 'Pokémon Go'.
La locura por 'Pokémon Go' está llegando a límites insospechados. Todos los días aparecen nuevas noticias relacionadas con el videojuego deNintendo y si creíamos que poco a poco la fiebre iría a menos, estábamos equivocados.
La última noticia la protagoniza Sophia Pedraza, una profesora que ha dejado a un lado a sus alumnos para poder dedicarse de manera profesional y a tiempo completo a 'Pokémon Go'.
Medios ingleses se han hecho eco de la noticia y explican que Sophia, quien ganaba unas 2.000 libras mensuales (más de 2.300 euros) dando clases de matemáticas, música y lengua en Londres, tomó esta decisión cuando comprobó que en Internet se están vendiendo cuentas de usuario en nivel avanzado por cantidades cercanas a su salario mensual.
Así que no se lo pensó dos veces y, tras despedirse de sus alumnos, se puso manos a la obra. La joven docente de 26 años es capaz de jugar hasta 18 horas diarias para conseguir dar caza a Pikachu y sus amigos.
En declaraciones a The Sun, Sophia explica que "ahora mismo se ha desatado la locura con Pokémon Go, pero si la cosa va a menos siempre puedo volver a dar clases". Esta decisión no ha sentado bien a todos los miembros de su familia . En un principio su madre pensó que había perdido la cabeza, pero "creo que la idea ya le va convenciendo", detalla.
La locura por 'Pokémon Go' está llegando a límites insospechados. Todos los días aparecen nuevas noticias relacionadas con el videojuego deNintendo y si creíamos que poco a poco la fiebre iría a menos, estábamos equivocados.
La última noticia la protagoniza Sophia Pedraza, una profesora que ha dejado a un lado a sus alumnos para poder dedicarse de manera profesional y a tiempo completo a 'Pokémon Go'.
Medios ingleses se han hecho eco de la noticia y explican que Sophia, quien ganaba unas 2.000 libras mensuales (más de 2.300 euros) dando clases de matemáticas, música y lengua en Londres, tomó esta decisión cuando comprobó que en Internet se están vendiendo cuentas de usuario en nivel avanzado por cantidades cercanas a su salario mensual.
Así que no se lo pensó dos veces y, tras despedirse de sus alumnos, se puso manos a la obra. La joven docente de 26 años es capaz de jugar hasta 18 horas diarias para conseguir dar caza a Pikachu y sus amigos.
En declaraciones a The Sun, Sophia explica que "ahora mismo se ha desatado la locura con Pokémon Go, pero si la cosa va a menos siempre puedo volver a dar clases". Esta decisión no ha sentado bien a todos los miembros de su familia . En un principio su madre pensó que había perdido la cabeza, pero "creo que la idea ya le va convenciendo", detalla.
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