Cameron y Courtney Hulet estaban acostados en el suelo de su sala de estar cuando una vecina los vio. No pensó mucho al respecto. Escuchó algún gemido y creyó que estaban dormidos, y cerró la puerta de entrada, que la pareja tenía el hábito de dejar abierta, según señaló David Uhl,gerenciador del poblado de Dundee en el sudeste deMichigan.
Era martes por la mañana.
La vecina contó que no vio a los Hulet en todo el día. Volvió a ver cómo estaban más tarde ese día. Estaban todavía tendidos uno al lado del otro. Paquetes de Taco Bell y algunas bebidas estaban junto a ellos en la mesa, sin tocar.
La mujer estaba con un hombre para inspeccionar la escena, contó Uhl a The Washington Post. Poco antes de la medianoche del martes, llamaron a la Policía.
Uhl indicó que probablemente la pareja estuviera muerta desde hacía 12 horas. Cuando la vecina los vio esa mañana, seguramente estuvieran ya muertos o "muy cerca" de estarlo.
Las muertes desconcertaron a los investigadores de esa ciudad a pocos kilómetros de Detroit. No había signos de un asalto violento o un trauma físico. La teoría más repetida es que quizás hubiera habido drogas de por medio, pero no había evidencia de que ambos hubieran padecido una sobredosis. Los resultados toxicológicos no estarán antes de las dos semanas.
"Es muy sospechoso. Es realmente extraño", dijo Uhl. "Crees que encontrarías algo. Frascos de pastillas, agujas, algo. Y no hay nada", añadió.
Los investigadores sí encontraron medio kilogramo de marihuana en la cocina, pero la Policía no sabe si tiene alguna conexión con las muertes. Uhl dijo que la droga fue dividida para ser vendida.
De acuerdo con el Departamento de Policía, Cameron Hulet, de 28 años y Courtney Hulet, de 20, se habían mudado hacía poco desde Newport, Michigan. Uhl señaló que la policía había estado en su apartamento varias veces luego de que los vecinos escucharan que se gritaban entre sí. Dos niños pequeños vivían con ellos, pero días antes de que sus padres murieran les habían quitado la custodia.
Uhl contó que las autoridades no sabían mucho respecto de Courtney Hulet, pero que Cameron Hulet, quien asistió a una escuela en Dundee, había sido arrestado por drogas.
"Estoy más allá de la tristeza por tu pérdida. Significas tanto para mí, estoy devastada. No puedo dejar de ver tu cara", escribió el hermano de Cameron, Garret Hulet, en su perfil de Facebook el miércoles.
"Cameron dejó atrás a una madre y a un padre devastados, su hermano gemelo, dos hermanos mayores, tres hermanastros y dos hijos", escribió Garetten el sitio GoFundMe, donde recauda dinero para pagar su funeral. "Es difícil de comprender. Fue tan súbito y trágico", añadió.
Cheryl Harris, la madre de Cameron, señaló a People que su hijo tenía dos trabajos para mantener a su familia. Contó que él y su esposa habían tenido problemas desde que sus dos hijos, de un año y de cuatro meses, fueron llevados a un orfanato. "Fue terrible para ellos. Me llamaron llorando sin parar. Los amaban", concluyó la mujer.
Por Kristine Guerra – The Washington Post.
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