Este viernes la diplomacia rusa aseguró que el informe que realizaron los expertos de la Organización Internacional para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ), que confirma el uso de gas sarín durante el ataque a Siria que ocurrió el 4 de abril de este año, está basado en "datos dudosos".
El informe plasmó que durante el siniestro "una gran cantidad de personas, de las cuales algunas fallecieron", se vieron expuestas a este compuesto químico o a un producto similar a él.
"Nos vemos obligados a constatar que sus conclusiones siguen estando basadas en datos muy dudosos", indicó el ministerio ruso de Relaciones Exteriores en un comunicado, en el que apunta a signos de una "campaña política".
Los resultados del escrito de esta organización internacional servirán de base para conformar una comisión conjunta de la ONU y la OPAQ que deberá decidir si el Gobierno de Damasco es el culpable de ese bombardeo químico en la localidad de Jan Sheijun.
Fuente: GV con información de AFP
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