La muerte de Marina Cardozo, joven venezolana de 21 años, generó diversas reacciones por las presuntas causas de su deceso. El cuerpo de la extranjera apareció desnudo con el interior a la altura de la rodilla en la parte posterior de la ciudadela Sí Vivienda, en Manta, provincia de Manabí de la costa del Ecuador. El hallazgo se registró la mañana del pasado sábado 17 de marzo del 2018. Hoy, 19 de marzo, sus familiares y allegados ponen en duda los resultados de la autopsia que reveló que la mujer no fue golpeada, ni violada y que la causa del fallecimiento es asfixia por aspiración de líquido gástrico (bronco-aspiración).
Estefanía A., prima de la occisa, comentó que la joven había salido la noche del viernes 16 de marzo alrededor de las 23:00 a una cena con amigos. Desde ese entonces, dijo, no sabía nada de ella hasta que la encontraron sin vida en la morgue tras haberse enterado por noticias, por lo que decidieron acudir al Centro Forense. “Para mí fue homicidio, pero lo que nos dicen es que ella murió por asfixia por el vómito de ella misma. Pero cuando ya la tengo acá en la casa la reviso y sí tiene marcas: en el ojo tiene una arañaso, como si la fuesen rasguñado en un forcejeo”, comentó la prima.
También indicó que en la planta del pie le dibujaron un corazón, aparentemente con una aguja sin tinta. Además, indicó, tiene unos puntos en la sien. El cadáver de la venezolana están siendo velados en la parroquia Los Esteros, en el sector en el que vivió desde hace diez meses, cuando llegó al Ecuador. Según familiares se dedicaba al comercio informal de arepas y empanadas en la calle.
por Diario EL COMERCIO
Entradas
0 comments:
Publicar un comentario