El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, anunció la noche del viernes que reanudará sus actividades oficiales «con todas las precauciones», por su discapacidad física, cuando el país va entrando en una fase de desescalada de las restricciones impuestas por el COVID-19.
En un mensaje a la nación, el mandatario ecuatoriano afirmó que quiere estar seguro de que «cada día, todos ustedes cuentan con salud y con empleo, que la productividad crece cada día».
Moreno llamó a la ciudadanía a respetar los protocolos de seguridad en un proceso de levantamiento de las limitaciones y que las autoridades han denominado de «reactivación económica y social».
«Sé que muchos todavía tienen miedo y claro, miedo a contagiarnos, miedo a perder el empleo, miedo a un futuro incierto, pero vamos a convertir ese miedo en prudencia, vamos a transformar ese miedo en valentía, retomando las actividades», apostilló.
Avanzó que la próxima semana viajará a Guayaquil y que «a pesar de mi condición de vulnerabilidad, ya acudí a la Asamblea Nacional (Parlamento), en donde se cumplieron los protocolos de seguridad».
En su alocución recordó que su Gobierno resolvió reducir a la mitad los sueldos del presidente, vicepresidente, ministros y viceministros.
Y que, además, los funcionarios verán reducida su jornada laboral en un 25 %, y su sueldo el 16 %, mientras que el resto de cargos y funciones estatales tienen instrucciones de recortar su gasto corriente entre el 10 y el 15 %.
Por otra parte avanzó que aquellos que ganen al mes más de 5.000 dólares, así como grandes empresas que no han sido afectadas por la emergencia sanitaria deberán aportar al país, monto que no especificó.
El jefe de Gobierno cargó contra algunas universidades públicas del país, que a su juicio «han distorsionado el sentido de la nueva asignación presupuestaria», y justificó que por ley los recursos para esos centros académicos dependen de la recaudación tributaria.
Por último, exhortó a la población en plena fase de desescalada a que siga haciendo uso de las mascarillas, así como el lavado frecuente de manos y la distancia prudencial para evitar contagios.
Ecuador registró este viernes 3.334 fallecidos por COVID-19 y otros 2.129 decesos probables, además de 38.571 positivos confirmados, de acuerdo al último reporte del Ministerio de Salud Pública. EFE
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