Más de cincuenta estudiantes, en su mayoría mujeres, fueron detenidas este jueves por la Policía chilena durante el desalojo de un campus de la Universidad Católica (UC) en Santiago que habían ocupado ayer para pedir el despido de funcionarios acusados de acoso sexual.
Agentes antidisturbios de Carabineros ingresaron a primera hora de este jueves al campus oriente de la UC, en el barrio santiaguino de Providencia, para desalojar a las estudiantes, que ayer habían definido la movilización como una “toma feminista”.
El operativo policial, que fue solicitado por el rector de la universidad, se saldó con un balance de 57 detenidos, 42 mujeres y 15 hombres, que fueron trasladados a las comisarías de Providencia y Ñuñoa.
Las estudiantes resaltaron el carácter pacífico de su movilización y denunciaron la violencia ejercida por los agentes antidisturbios.
“En las dependencias de la toma no se efectuó ningún acto de violencia excepto los múltiples infligidos por Fuerzas Especiales, que destrozaron puertas, chapas, vidrios e irrumpieron en salas cerradas de todos los espacios académicos”, indicaron las estudiantes en un comunicado.
“Golpearon a compañeras, les dieron patadas y destrozaron puertas de vidrio”, añadieron las universitarias que protestaban en el campus oriente de la UC, donde están las facultades de Arte, Música y Teatro.
Las estudiantes iniciaron ayer una ocupación indefinida del recinto para exigir el despido de dos funcionarios de la universidad que han sido acusados de acoso sexual.
“No entendemos cómo les cuesta tanto entender que lo único que pedimos es tener un espacio seguro en nuestras salas, un espacio libre de abusadores, acosadores y violadores que se pasean alrededor nuestro como si nada”, señalaron en el comunicado.
La UC indicó ayer que ha abierto investigaciones contra cinco alumnos y dos académicos por las denuncias de acoso sexual y violencia física, pero rechazó la medida de presión de las estudiantes.
Con información de AFP
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