¡Insólito! Mujer murió de hambre luego de hacerse un bypass gástrico

 Una madre murió de hambre luego de que ella luchó por comer después de un bypass gástrico, según ha informado una investigación.

Kimberley Wall se había sometido al procedimiento en 2008 por temor a que su obesidad la matara, pero durante los siguientes diez años su peso se desplomó hasta que pesó sólo cinco piedras.

La mujer de 44 años, de Rochdale, Greater Manchester, sólo podía manejar dos bocados de comida y estaba tan débil que apenas podía caminar o incluso levantarse de la cama.

A pesar de los repetidos intentos de los médicos para tratarla, la señorita Wall ingresó en el Hospital Fairfield, en Bury, después de que su condición empeorara.

Murió una semana después con pruebas que mostraban que había sufrido insuficiencia cardíaca debido a la desnutrición a la que contribuyó la operación de bypass gástrico.

En 2014, hizo público su procedimiento diciendo que lo hizo por recomendación de un consultor a pesar de las preocupaciones de su familia.

Dijo que se sintió atraída por la idea porque quería correr por el parque con sus hijos, pero declaró que había pasado de estar «demasiado gorda para moverse a estar débil y desnutrida».

«Pensé que la operación me daría la vida que había soñado, pero resulta que no podría haber estado más equivocada. Apenas podía comer algo. Lo que sea que logré tragar hizo que mi estómago se revolviera. Me sentía mal todo el tiempo», dijo Hall.

La madre de la señorita Wall, Muriel Stephenson, dijo que su hija había comenzado a aumentar de peso 18 años antes de su muerte y que había sido un aumento constante hasta que alcanzó la marca de las 23 piedras.

Wall fue ingresada repetidamente en el hospital durante un período de seis años antes de ser derivada para ver a un especialista.

Su madre agregó que había ingresado por dolores de estómago y había logrado aumentar un poco de peso, pero no pudo obtener respuestas a lo que estaba causando el dolor. Kim se había derrumbado en casa y fue admitida una vez más.

El médico de cabecera de la señorita Wall, el Dr. Richard Darling, dijo que la señorita Wall tuvo una revisión después de la cirugía y que había estado luchando con la tolerancia alimentaria.

El Dr. Darling dijo que habían discutido un trastorno alimentario, pero que la señorita Wall sentía que no había sido así, alegando que quería comer pero no podía.

El experto médico, Dr. Khurshid Akthar, un cirujano consultor, dijo: «Se habría hecho una evaluación para determinar si la operación es lo correcto. La mayoría de los pacientes pierden hasta un 70% de exceso de peso corporal, pero la operación tiene complicaciones y riesgos».

«Todos los pacientes necesitan algunos suplementos y tienen que tomar minerales y vitaminas, luego hay un suplemento de por vida que debes tomar», agregó Akthar.

Nicola Rimmington, una enfermera principal del hospital Fairfield, dijo en la audiencia: «Caminó con un marco y sólo pudo manejar un tramo de escaleras (…) No creo que ninguna enfermería haya contribuido a su pérdida, pero hubo una demora en referirse a la dietista y se ha hablado con dos miembros del personal que no pudieron cumplir con las observaciones».

Al registrar una conclusión narrativa, el forense Matthew Cox dijo: «Después del procedimiento de derivación gástrica, Kimberley apenas podía comer nada después de un par de bocados y luchando con la retención de alimentos».

«Hemos tenido poca información sobre la operación en sí, ya que quienes la trataron no están aquí para dar evidencia. Pero existen riesgos y beneficios para el procedimiento. El problema de Kimberly con la nutrición es una complicación rara pero reconocida de la cirugía de bypass gástrico», agregó.

Con información de Dailymail