Una reconocida marca de pizza empezó a entrenar a una veintena de renos como repartidores a domicilio, una idea que pretende busca hacer frente a las difíciles condiciones climatológicas que se esperan este invierno. Los animales comenzaron a ser entrenados a mediados de noviembre, cuando se decidió probar esta iniciativa, cuya puesta en marcha final aún se está "considerando", explicó un portavoz de la empresa.
La compañía publicó un vídeo en YouTube en el que se muestra a los renos equipados para transportar pizzas, aunque los animales muestran serias dificultades para mantener la integridad de los pedidos, que acaban por la nieve. La pizzería está ultimando arreglos que aseguren la seguridad en el reparto, y estudia la distancia máxima que los animales podrían recorrer o qué pasaría si se encontraran con mascotas al llegar a su punto de entrega.
En el caso de que la propuesta siguiera adelante, la cadena de pizzerías comenzaría a usar hasta 20 renos en sus repartos a partir de diciembre, confirmó el portavoz. Entre las ventajas, destacan la gran capacidad de carga de los sistemas acoplados a los renos, y que estos podrían alcanzar 80 kilómetros por hora.
El estado de la entrega podría comprobarse mediante un sistema de GPS de seguimiento de los renos, similar al que ya se utiliza en las motos de los repartidores. La compañía pretende no solo facilitar el reparto en condiciones invernales, sino que sus clientes disfruten del "espíritu de la temporada". El plan de entrenar a renos se debe a las previsiones de la agencia meteorológica japonesa que hablan de un invierno más duro de lo normal en la isla más septentrional del archipiélago nipón.
Fuente: excelsior.com