La medida, que se ha hecho efectiva de manera inmediata, estará en vigor mientras dure el riesgo de incendio en Camberra, apuntó a los medios el ministro jefe del territorio capitalino, Andrew Barr.
Los incendios "pueden quedar descontrolados" por lo que el estado de emergencia "sirve para que las familias se preparen" ante el peligro, aseguró el ministro sobre esta medida, que llevaba 17 años sin activarse en Camberra, que cuenta con 400.000 habitantes.
El servicio de meteorología australiano pronosticó para los próximos días una subida de temperatura hasta los 40 grados centígrados y fuertes rachas de viento que podrían avivar los fuegos.
La principal preocupación se centra en un foco en el valle de Orroral, al sur de la capital, que ya ha arrasado 18.000 hectáreas.
Más de 80 incendios forestales continúan ardiendo en los estados australianos de Victoria y Nueva Gales del Sur, los más afectados por los fuegos.
Desde septiembre hasta ahora los incendios se han cobrado la vida de 33 personas y han arrasado un terreno mayor al tamaño de Siria (180.000 kilómetros cuadrados).
Fuente: Globovisión |AFP|CP
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