Para aumentar aún más la prevención, la directora general de salud de Portugal, Graça Freitas, anunció en rueda de prensa que mañana jueves entra en funcionamiento un nuevo modelo de trabajo para combatir el virus, ya que se pasa de la fase de contención a la de mitigación para evitar masificación de contagiados en los hospitales.
De esta manera, aquellos enfermos con síntomas leves -que se calculan podrían ser el 80 %- se quedarán en su domicilio y tendrán un seguimiento por los profesionales de su área de salud.
Un 15 %, estimó Freitas, tendrán síntomas más moderados y serán derivados a los centros de salud, que no a los hospitales.
Allí, cada centro de salud tendrá un área específica para los pacientes de coronavirus, ya que, según la directora, el objetivo es "que esos dos mundos (positivos y negativos) no se junten".
Calculan las autoridades lusas que el 5 % restante sean enfermos más graves que, si lo precisaran, serán internados en planta o en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de algún hospital. Por zonas, la más afectada es el norte, con 1.517 positivos y 20 fallecidos.
La región de Lisboa ha registrado hasta hoy 992 contagiados y 12 muertos, mientras que en la región Centro se han contabilizado 365 casos positivos y 10 fallecimientos por Covid-19.
En el sur de Portugal los casos son muy inferiores, ya que en el Algarve hay registrados 62 caos y un fallecido, y en el Alentejo fueron diagnosticados 12 casos y no hay fallecidos.
Según la Dirección General de Salud (DGS) de Portugal, hay 276 pacientes internados en los hospitales (73 más que ayer) y 61 se encuentran en UCI (13 más).
Las autoridades lusas insisten en las medidas de contención y han destacado el plan de cuarentena establecido para todos los que estos días han ingresado en Portugal desde el extranjero, que tienen la obligación de permanecer aislados durante 14 días.
Sobre los casos de COVID-19 importados, el número de positivos procedentes de España es de 46, frente a los 30 de Francia y los 20 de Italia.
Portugal está a la espera de que lleguen 80.000 nuevos test para reforzar su stock, en una jornada en la que el primer portugués luso, António Costa, al contrario de lo que dicen los colegios de médicos y los enfermeros, insistió en que no hay carencias de material sanitario.
Costa visitó hoy el hospital lisboeta Curry Cabral para conocer la situación de equipos y cómo se está gestionando el material disponible.
Explicó que se ha encargado recientemente más material hospitalario porque "el material se va gastando", y argumentó que lo que está ocurriendo es que se están "racionalizando" los recursos.
Asimismo, defendió que el balance diario de contagiados y fallecidos es fiable, algo que ya expresó este martes el presidente del país, Marcelo Rebelo de Sousa, ante la suspicacia levantada por el lento avance del virus en el país.
Fuente: Globovisión | EFE | YY
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